El viento

Viernes, 12 de Febrero de 2010 08:09

Confesión del viento(Yacomuzzi-Falú) por Libresur.

Vientos(Eduardo Guajardo) por el autor.

Polka del viento (Héctor Raúl Ossés) por el autor.

Junto a la puerta de la casa un papel aletea como un gallo moribundo. Se debate (como un blanco gallo agonizante). El viento ladra poseído por oncemil demonios y el polvo de las calles se retuerce en un baile, gira como carreteles en la máquina de hilar las tempestades.

El viento es un andariego loco.
Quiere destechar las casas, llevarse hasta el medio de Atlántico el techo entero de un ginmasio, desarmar un galpón industrial como si fuera un castillo de naipes; sacudir cables, arrancar la ropa de los cordeles, esmerilar los vidrios, silbar (sobre el filo de una chapa) un alarido interminable.

Dicen que se arrepiente de haber volado nidos, dicen que se tortura porque a veces juega con los pájaros, las cosas y la gente. El viento le confesó cosas a Roberto Yacomuzzi, como disculpándose: que el árbol ya estaba viejo, que a veces los pichones son apresurados. Ese día, dice Roberto, el viento “Iba quebrado de culpas y en su lomo de distancia no cabalgaba ni un pájaro. Era un fantasma ese viento (agrega), un alma en pena penando”.
“Que nadie pise este suelo sin pedir permiso al viento” pide (o advierte) Eduardo Guajardo. Y asegura que es el viento quien mas sabe de la extensión de nuestra tierra.
No sé. Yo les aseguro que cuando “chifla” el viento, es mala señal.
No salgas al viento. Te puede arrancar la cabeza de cuajo, te hará moder el polvo, te retorcerá, te agitará en el aire como una bolsa plástica vacía y te dejará para siempre pegado a los alambres para que te seques, y desaparezcas recién al cabo de dos mil años de agonía
Y si alguna noche, disfrazado de papel en blanco, revolotea junto a tu casa, no le abras . No le abras la puerta al Viento.

Fuente: http://www.vocesyapuntes.com/index.php?option=com_content&view=article&id=6378:el-viento&catid=20:hector-qgatoq-osses